From the ground up!

Mi nombre es Eyaelkys Mejia, para sorpresa de muchos, soy Ingeniera en Sistemas con un Mba en Ingeniería de Software. Partiendo a lo que nos compete en este post soy la Founder CEO de Jardín de Novias. Si, no tiene nada que ver una cosa con la otra, pero el amor es así… Nos lleva por caminos inesperados.

Este proyecto inicia en el 2009. Desde que iniciamos hemos celebrado momentos especiales, compartido lágrimas de felicidad y caminado el sendero junto a todos los que nos han permitido acompañarlos en sus celebraciones más importantes. Con tanto amor quedan grabad@s en nuestros corazones las novias, quinceañeras, damas, madres, padres y todos aquellos que han confiado en nosotros y han dicho que SI.

Jardín de Novias nace como una respuesta a las novias que buscan recibir un servicio excepcional acompañado de un producto de calidad. Sin embargo, su origen es aún más personal que esta frase. Nace a raíz de mi propia boda. En ese proceso de organización y toma de decisiones pude reconocer las fortalezas y las debilidades que había en el mercado de las bodas en República Dominicana. De alguna manera, fue una experiencia que conecto con mi esencia.  Al plantearle a mi madre la idea de abrir una “Casa de Novias” me dijo que lo pensara, que era posible que me hubiera quedado encantada en el romance de mi propia boda y le escuche. Lo pensé unos meses y la idea seguía ahí. Una voz en mi cabeza me decía “Tú puedes hacer esto”. Como la idea no se fue, unos meses más tarde estábamos recibiendo nuestro primer pedido (cabe destacar que con muchos errores) de vestidos de novia.

Siempre me sentiré eternamente agradecida de mi suegro, que con toda la caballerosidad que lo caracteriza puso a nuestra disposición un local que había rentado “para que nosotros lo intentáramos”. El, un hombre visionario, emprendedor en sí mismo no quería cortarnos las alas, aun sabiendo por experiencia propia que levantar un negocio no es cosa para los débiles.

Una vez puesto en marcha el proyecto contamos con el apoyo de nuestras familias. En comprensión, amor, vestidos, palabras de apoyo y un sin fin de actitudes que nos empujaron a seguir adelante. Nada fuera posible sin ellos. Su apoyo fue neurálgico para alcanzar el éxito.

En diciembre 2009, a 5 meses de tener mi primer bebe, inauguramos Jardín de Novias. Con mucha ilusión, sacrificio, un inventario muy limitado, nada de experiencia, pero con fe de que podíamos aprender a volar, pero para eso había que atreverse a dar el primer paso.

Esos primeros meses fueron difíciles pero enriquecedores. Aprendimos a escuchar nuestros clientes, entender lo que necesitaban, conectar con sus necesidades, reconocer cuando nos equivocamos y brindar soluciones. La honestidad y transparencia nos permitió ganarnos el corazón de mucha gente que piso nuestra puerta que si bien no encontraron lo que buscaban seguían refiriendo clientes que si encontraron su vestido con nosotros.

Levantar un negocio requiere mucho de nosotros. Muchas noches de desvelo, decisiones difíciles, a veces tomas las decisiones correctas, a veces no. Requiere resiliencia y capacidad de rediseño. Han pasado ya 14 años de aquella conversación en la galería de una amiga donde dije que yo entendía que podía. En ese tiempo he vivido toda clase de situaciones, pero cada una enriquecedora en su manera. La vida siempre te pondrá el aprendizaje frente a ti, solo tienes que tener la apertura de reconocer las lecciones.

Emprender no es fácil y definitivamente no es para todo el mundo. ¡Pero tengo la certeza de que si se puede construir “From the groud up!”

Seguimos en otro post, es posible que estas palabras le sirvan a alguien algún día. Sabe Dios todas las palabras de ánimo que yo he necesitado y seguiré necesitando.

Aprovecho la ocasión para expresar mi eterno agradecimiento con nuestras hermosas familias y amigos que continúan apoyándonos hasta el día de hoy.

XO,

Eyaelkys